Si hace falta un reglamento para los monosabios, hágase en seguida, y póngase
coto a sus desmanes…”, ANTONIO PEÑA Y GOÑI, “DON JERÓNIMO”, La Lidia (1886)
Se armó allí una gritería
al mirar lo que pasaba
y en tanto, el mono pinchaba
y el pobre penco sufría.
Mozos de caballo que prestan su servicio con los de los picadores en la plaza
(Cossío)
El Diccionario de la Real Academia de la Lengua lo define como “ mozo que
cuida del caballo del picador y le presta servicio en la plaza”.
Se tomó en el siglo pasado del circo por el parecido casual del uniforme de
unos monos con el que llevaban los mozos de caballos de la plaza de Madrid.
“FIACRO YRAIZOZ”, El Chiquero
(1887)
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