“Una Real Orden del 15 de junio (1928) de este año de gracia mete en cintura, para esclarecimiento de su seso y bienestar de sus costillas, a los antiguos varilargueros – hoy picadores y pronto matadores de a caballo -, disponiendo “la obligatoriedad de los petos en todas las plazas”. Con la chusca aclaración de que “si las dimensiones del ruedo hiciesen peligroso su uso, podrían darse corridas de toros y novillos suprimiendo la suerte de varas””

" …jinete en un penco blanco, cubierto con un peto de cuero". (J. Pedro de Domecq: La tienta a acoso)

 "En los toros defensa generalmente de cuero, que se pone a los caballos para protegerles el pecho y parte derecha del cuerpo en la suerte de picar, Se ha usado siempre en faenas de campo y es hoy reglamentario su uso en la plaza" (Cossío)